Lo bueno y lo malo, sin endulzar

Un lugar oculto, al borde de la playa, bajo la sombra del majestuoso monte Agung. Perfecto para bucear y relajarse con el sonido del océano. Atención excepcional del personal, especialmente de Eka, el maestro de buceo. Comida deliciosa y opciones vegetarianas. Ideal para quienes buscan tranquilidad y excelentes servicios de buceo.

Ideal para bucear y relajarse.

El Scuba Seraya Resort es realmente hermoso. Las instalaciones son amplias y los jardines están muy bien cuidados. La playa de arena es espectacular, ideal para relajarse. Disfruté de las habitaciones, espaciosas y cómodas, aunque es cierto que no están insonorizadas. Pude escuchar a un vecino un poco ruidoso, lo que dificultó mi sueño. La comida era sabrosa, pero un poco más cara en comparación con otros lugares de Bali. La ubicación es tranquila y alejada de la civilización, lo que ofrece un ambiente perfecto para desconectar. Sin embargo, la relación calidad-precio de la carta podría mejorar. es necesario desplazarse a Amed o Tulamben para encontrar más variedad de opciones. El centro de buceo fue un gran añadido, ideal para los entusiastas, pero necesitaría un mejor servicio en el restaurante para complementar la experiencia. En general, un buen destino de relax con algunos ajustes necesarios.

Un lugar ideal para los amantes del buceo y el relax, con un entorno natural impresionante y un personal siempre atento y amable. Las habitaciones tienen un diseño encantador y ofrecen vistas al mar, aunque el menú del restaurante puede resultar un poco caro comparado con otras opciones en la zona.

Un paraíso para buceadores

El lugar es hermoso, con un ambiente super tranquilo. La comida en el restaurante era buena, especialmente los platos de mariscos. Las habitaciones son cómodas y tienen vistas al mar, aunque se escuchaba un poco a los vecinos. A veces el servicio era lento, lo que puede ser molesto.

El lugar es paradisíaco, perfecto para relajarse y disfrutar del mar. Las habitaciones son cómodas y cuentan con una vista al mar que es simplemente maravillosa. Cada mañana, despertarse con esa vista es un verdadero regalo. Además, el ambiente es muy tranquilo, lo que permite desconectar completamente. La experiencia de snorkeling en los barcos hundidos cercanos fue un punto destacado de mi estancia.

La comida puede ser un poco más cara comparada con otros lugares de Bali.

Pasamos un tiempo increíble con mis amigos. Hicimos senderismo por las montañas cercanas y exploramos unas cuevas impresionantes. El personal fue muy acogedor y las instalaciones estaban limpias y bien cuidadas. Sin duda, recomendamos aprovechar las excursiones de ecoturismo que ofrecen.

Tuvimos un pequeño inconveniente con el aire acondicionado en nuestra habitación, que no funcionaba correctamente al principio.

El lugar es muy bonito con vistas al mar que son realmente impresionantes. La experiencia de buceo fue increíble, aunque la comida es un poco más cara de lo que esperaba. Tuve algunas molestias con los ruidos de las habitaciones vecinas que afectaron mi descanso. A pesar de esto, el ambiente tranquilo hace que valga la pena para aquellos que buscan relajación.

Lindo lugar con acceso a la playa y excelente piscina, pero ruidos de vecinos molestos.

Las cabañas son preciosas, con vistas al mar, creando un ambiente perfecto para relajarse. La ubicación es tranquila, lejos del bullicio, ideal para escapar y disfrutar de la naturaleza.

Aunque la comida es sabrosa, los precios son más altos que en otros lugares de Bali, y la relación calidad-precio de la carta deja que desear. Las cabañas también pueden tener un toque de vida silvestre, ya que algunas lagartijas hacen visita en la habitación, lo que podría incomodar a algunos. El servicio de masaje no cumplió con mis expectativas. no estaba bien coordinado y resultó ser la experiencia menos placentera de la estancia.

La comida estuvo de lujo! Los mariscos frescos y las opciones vegetarianas fueron un verdadero espectáculo. Además, el snorkeling en los barcos hundidos cerca fue increíble, una experiencia que no te puedes perder. Las instalaciones son preciosas y el ambiente es ideal para relajarte, con ese mar enfrente que te deja sin aliento.

Aunque el lugar es hermoso, no hay muchas opciones para comer alrededor, así que toca apechugar con los precios del restaurante, que son un poco más altos. Además, las paredes son tan delgadas que escuchas claramente a los vecinos, y las cortinas no ayudan si buscas un buen descanso.